Haliburton anota triple con 1.1 segundos: Pacers vencen a Cavs 120-119 y van 2-0 en la serie

Haliburton anota triple con 1.1 segundos: Pacers vencen a Cavs 120-119 y van 2-0 en la serie

Con 1.1 segundos en el reloj, Tyrese Haliburton levantó el Indiana Pacers desde el abismo. Su triple desde la parte alta de la llave, limpio, frío, imposible, dio la victoria 120-119 sobre el Cleveland Cavaliers en el Rocket Mortgage FieldHouse de Cleveland, el martes 6 de mayo de 2025. No fue un golpe de suerte. Fue la culminación de una hazaña de 47.9 segundos que dejó sin aliento a la afición local y reescribió la historia de los playoffs. Los Pacers, cuarto sembrado, remontaron una desventaja de 17 puntos a falta de 2:30 para el final del tercer cuarto. Y lo hicieron contra el equipo más fuerte de la Conferencia Este, el líder de la temporada regular con 58 victorias.

La remontada que nadie esperaba

Los Cavaliers, con Donovan Mitchell a full gas, arrasaron en el primer cuarto: 32-15. Parecía una masacre anunciada. Mitchell anotó 15 puntos en el tercer cuarto, llevando a Cleveland a una ventaja de 98-81. El público gritaba, los jugadores celebraban, y el home court advantage parecía inquebrantable. Pero entonces, algo cambió. El Indiana Pacers encendió un fuego que no se apagó. Con un 17-6 en los últimos minutos del tercer cuarto, entraron al último período con vida. Y ahí, en el cuarto, se volvió épico.

Myles Turner fue la columna vertebral defensiva: 23 puntos, 8 rebotes, 5 tapones. Aaron Nesmith no se dejó intimidar: 23 puntos, 5 triples de 8 intentados. Pero fue Haliburton quien, con cada pase, cada finta, cada robo, convirtió el caos en claridad. En los últimos 12 minutos, anotó 11 de sus 19 puntos. Y en los últimos 48 segundos, fue el alma de la remontada.

El momento decisivo: un error, un robo, un rebote y un triple

Con 1:06 en el reloj, Max Strus encestó un triple asistido por Mitchell. 117-110. Cleveland, a solo 7 puntos del triunfo. Pero entonces, todo se desmoronó. Dos errores consecutivos. Dos rebotes ofensivos de los Pacers. El reloj se aceleraba. Con 27.5 segundos, Andrew Nembhard robó el pase de salida de Strus. El Indiana Pacers tenía una oportunidad. Buscaron el triple, pero el defensor estaba bien colocado. Haliburton, sin espacio, entró hacia la canasta, atrajo a dos defensores y fue fouleado.

En la línea de tiros libres, hizo el primero. El segundo… lo lanzó con intención de que no entrara. Y lo recuperó. Sin dudar, corrió hasta la línea de tres. El reloj marcaba 1.1 segundos. El público enmudeció. La pelota giró en el aire… y cayó. Redonda. Sin tocar el aro. El Rocket Mortgage FieldHouse se quedó en silencio. El estadio, que hacía minutos vibraba con gritos, ahora solo respiraba.

La reacción: entre el asombro y la desesperación

Jarrett Allen, el pívot de los Cavaliers que tuvo 22 puntos y 12 rebotes, lo dijo con crudeza: “Sentimos que los superamos la mayor parte del partido… pero al final, cometimos errores mentales. Ellos aprovecharon cada uno.” Y tenía razón. Los Cavaliers tuvieron 18 pérdidas de balón, 6 en el cuarto periodo. En un partido donde la diferencia fue de un solo punto, eso fue fatal.

Por su parte, el técnico de los Pacers, Rick Carlisle, apenas pudo hablar tras el partido. “No es solo que ganamos. Es cómo lo hicimos. Haliburton no solo hizo un triple. Hizo una jugada de baloncesto perfecta: lectura, paciencia, coraje. Eso no se entrena. Se nace con ello.”

Un récord histórico para Cleveland

Este es el primer desde 1996 que los Cavaliers pierden sus dos primeros partidos como local en una serie de playoffs. En aquella ocasión, fueron eliminados por los New York Knicks en la primera ronda. Ahora, con un equipo más fuerte, con Mitchell en su mejor momento, con la ventaja de casa… y aún así, caen. La presión se intensifica. La confianza se resquebraja.

Los Pacers, por su parte, no solo llevan 2-0 en la serie. También llevan el momentum. El alma. La creencia. Y ahora, tienen el sueño de un 3-0. Regresan a Gainbridge Fieldhouse en Indianapolis para el Game 3 el sábado 10 de mayo y el Game 4 el lunes 12. Si ganan uno de esos, la serie se va a Cleveland con el 3-0 a favor. Y eso, en playoffs, es casi una sentencia.

¿Qué sigue? El peso de la historia

El Indiana Pacers no gana una serie de semifinales desde 2005. Pero ahora, con Haliburton en su mejor versión, con Turner dominando la pintura, y con un equipo que juega con fuego, el horizonte cambia. El baloncesto moderno valora la capacidad de remontar. Y este equipo, en los últimos 15 días, ha demostrado que sabe hacerlo.

Los Cavaliers, en cambio, deben responder. Mitchell no puede ser el único. Necesitan más apoyo. Más disciplina. Más concentración. Porque si no lo hacen, este triple de Haliburton no será solo un momento memorable… será el principio del fin.

Frequently Asked Questions

¿Por qué es tan significativo este triunfo para los Pacers?

Este triunfo es histórico porque los Pacers, como cuarto sembrado, vencieron al líder de la conferencia en su casa, remontando una desventaja de 17 puntos en el tercer cuarto. Es la mayor remontada en la historia de los playoffs de la franquicia desde 1995, y la primera vez que ganan un partido en Cleveland en playoffs con un triple en los últimos segundos. Además, llevan una ventaja de 2-0 en la serie, algo que solo han logrado dos veces en su historia en semifinales.

¿Qué tan raro es que un jugador anote un triple ganador con 1.1 segundos tras un rebote ofensivo y un tiro libre intencional?

Extremadamente raro. En la historia de la NBA, solo tres veces en playoffs un jugador ha hecho un triple ganador tras un rebote ofensivo en los últimos 3 segundos. Haliburton es el primero en hacerlo combinado con un tiro libre intencional mal lanzado para recuperar el balón. Esto requiere no solo habilidad, sino una toma de decisión de alto riesgo que solo los jugadores con mayor confianza en el clutch logran ejecutar. Su acción fue perfecta en cada detalle.

¿Cómo afecta esto a la serie y a la moral de ambos equipos?

Para los Pacers, es un impulso psicológico enorme: creen que pueden vencer a cualquier equipo, en cualquier escenario. Para los Cavaliers, es un golpe devastador. Mitchell, aunque anotó 48 puntos, no puede ganar solo. La falta de apoyo en defensa y los errores en los minutos decisivos generan dudas en el vestuario. Si pierden en Indianapolis, la presión sobre el entrenador J.B. Bickerstaff se volverá insostenible.

¿Cuál es el próximo paso crítico para los Cavaliers?

Necesitan que otros jugadores, además de Mitchell, asuman responsabilidad. Strus, Allen y Okoro deben ser más consistentes en defensa y en ataque. Además, deben reducir sus pérdidas de balón —en este partido fueron 18, el doble que los Pacers— y evitar los lapsos mentales en los últimos minutos. Si no lo hacen, la serie podría terminar antes de volver a Cleveland.

¿Ha hecho Haliburton algo similar antes en playoffs?

Sí. En los dos partidos anteriores de esta ronda, Haliburton anotó puntos decisivos en los últimos 30 segundos: un triple para empatar contra los Bulls y una asistencia en el último segundo para el ganador ante los Bucks. Esta es su tercera actuación clutch consecutiva en playoffs, algo que ningún jugador de los Pacers ha logrado desde Reggie Miller en 1998. Está construyendo su legado en tiempo real.

¿Qué significa esto para el futuro de los Pacers en la NBA?

Si avanzan a las Finales de la Conferencia Este, los Pacers se convierten en un equipo de alto perfil. Haliburton podría ser MVP de la ronda, Turner en el Quinteto Defensivo, y el equipo en general se posiciona como candidato real al título. Este triunfo no solo cambia la serie: cambia la percepción de la franquicia. Ya no son un equipo que se queda en semifinales. Ahora, son un equipo que puede ir más lejos.